El rol del productor, un puente entre la idea y lo que llega a la pantalla

Puedes ser autor de una historia increíble, pero si no se divulga quedará en el laberinto de tu mundo personal. El talento sobra, pero la gestión escasea. El emprendedor, con su arte de vender, es el más vital para cualquier proyecto. Sin movimiento financiero, las obras se estancan en la teoría y no florecen en la práctica.
Un buen productor de cine es una figura que merece más mérito porque además de llevar una idea a cabo, tiene otras cualidades. A partir de lo obvio: manejar logística, contratar talento, etc…, uno de sus dones artísticos es la manera eficaz de resumir un proyecto con el objetivo de atraer inversión. El guionista y director de una película suelen enmarañarse explicando el subtexto y estilo, mientras que el productor prudente solo difunde lo esencial. Él es el equilibrio entre la idea abstracta y la obra alcanzable.
En series como Los Sopranos, el productor se encarga de que la narrativa siga cierto camino. Tiene que trabajar extensamente con los libretistas para que haya desarrollo de la trama, los conflictos y los personajes. El director de fotografía se asegura de mantener el estilo visual y muchas veces, los directores son solo artistas invitados para poner su toque a un trabajo que ya tiene su propio sello estético.
Los ejemplos de las maravillas que hacen los productores son prolíficos. En el clásico, Gone with the Wind, (Lo que el viento se llevó), una película que pasó por tres directores, fue el productor David O. Selznick quien mantuvo el orden en medio de ese caos para que la obra se viera en la gran pantalla. Lawrence Bender, como productor, convenció a Quentin Tarantino para que no grabara Reservoir Dogs (Perros de la calle) 1992 en video y esperara que él buscara los fondos para rodar el filme. Dino De Laurentis tiene una variación de trabajos como Death Wish (El vengador anónimo) y Blue Velvet (Terciopelo azul). La primera es considerada cine popular y la siguiente, cine arte.
Con el filme de Ciro Guerra El abrazo de la serpiente, Dago García y su casa productora ha silenciado a los críticos altisonantes que menosprecian sus obras taquilleras como director. Se podría defender Dago García justificando que vende comida rápida para poder regalar postres exquisitos; en palabras más claras, él dirige películas populares (El paseo) para poder producir filmes independientes. A la hora del té, sabemos que ambos platos satisfacen el ecléctico paladar estético.
El espíritu del emprendedor debería ser más reputado; sin su loable labor, no habría arte asequible. Figuras como Harold Ospina Hincapié en Barranquilla y Juan Caceres Carreño, un chileno radicado en Nueva York, están en la mira. Guerreros del cine independiente como ellos nunca sobrarán. Esperemos que este talento aflore para manifestar el arte del productor y así finalmente disfrutar de la faena.
A continuación presentamos una lista con filmes y series que contaron con productores que las convirtieron en éxitos de la industria.
Los sopranos (1999) Productor: David Chase. El jefe de la mafia de Nueva Jersey, Tony Soprano, se ocupa de cuestiones personales y profesionales en su vida que afectan su estado mental, lo que lo lleva a buscar ayuda psiquiátrica profesional.
Demencia 13 (1963). Productor: Roger Corman. Conmocionada por la muerte de su cónyuge, una viuda intrigante trama un plan audaz para conseguir su herencia, sin saber del ritual morboso que la familia celebra cada vez que un hecho así sucede.
El vengador anónimo (1974) Productor: Dino De Laurentiis. Un arquitecto de la ciudad de Nueva York se convierte en una especie de vigilante de la ciudad, después de que su esposa es asesinada por delincuentes callejeros.
Terciopelo azul (1986). Productor: Dino De Laurentiis. El descubrimiento de un oído humano en un campo lleva a un joven a una investigación relacionada con una hermosa y misteriosa cantante de club nocturno y un grupo de criminales psicópatas que han secuestrado a su hijo.
Lo que el viento se llevó (1939). Productor: David O. Selznick. Una mujer manipuladora y un hombre rudo llevan a cabo un romance turbulento durante los períodos de la guerra civil y reconstrucción de los Estados Unidos.
Perros de la calle (1992). Productor: Lawrence Bender. Cuando un simple robo de joyas sale horriblemente mal, los criminales sobrevivientes comienzan a sospechar que uno de ellos es el informante que los delató a la policía.
El abrazo de la serpiente (2015). Productor: Cristina Gallego. La historia de la relación entre Karamakate, un chamán amazónico y último sobreviviente de su pueblo y dos científicos que trabajan juntos a lo largo de cuarenta años para buscar en el Amazonas una planta curativa sagrada.
Diamante para la eternidad (1971). Productor: Albert R. Broccoli. Una investigación de contrabando de diamantes lleva a James Bond a Las Vegas, donde descubre un complot malvado que involucra a un magnate rico. El agente secreto inglés deberá desenmascarar sus planes.
Breaking Bad (2008). Productor: Vince Gilligan. Un profesor de química de la escuela secundaria, diagnosticado con cáncer de pulmón inoperable, se involucra en la fabricación y venta de metanfetamina con el fin de asegurar el futuro económico de su familia.
Los olvidados (1950). Productor: Oscar Dancigers. Un grupo de delincuentes juveniles viven una vida violenta y llena de delincuencia en los tugurios de la ciudad de México. La moral del joven Pedro es gradualmente corrompida y destruida por el entorno.