PoeMaRío boga en las ‘aguas’ de la virtualidad

El Festival Internacional de Poesía en el Caribe, que culminará este domingo 30 de agosto, lleva a cabo su edición número 13 a través del Facebook Biblioteca Piloto del Caribe. Conozca su programación.
“Navegar” por el mar y el río de la palabra poética como forma de conocimiento, alternativa de sensibilización y creación de pensamiento crítico, es uno de los objetivos del Festival Internacional de Poesía en el Caribe PoeMaRío que, para este inusual año, decide celebrar su edición número 13 en la virtualidad, zanjando las ‘tormentas’ de una pandemia que no da tregua.
Es así como, desde el pasado martes, los organizadores dieron apertura a la programación que comprende diálogos, charlas, recitales y los componentes musical, reflexivo y “casi tallerístico en las alocuciones entregadas cada día”. Sobre sus invitados, se conoce que cuenta con más de 60 ilustres poetas regionales, nacionales e internacionales, estos últimos provenientes de Finlandia, Guatemala, México, China, Estados Unidos, Brasil, Argentina, Chile, Cuba, Puerto Rico, Costa Rica y Perú.
Miguel Iriarte, director de la Biblioteca Piloto del Caribe y también del evento, explica que algunas de las actividades que no pertenecen a la alianza con otras entidades afines (Fondo Mixto de Promoción de la Cultura y las Artes de Sucre, Fundación Casa de Hierro, Encuentro Internacional de Mujeres Poetas Cereté y Fundación Cultural Letra Clave y Séptima Letra Diego Galindez, entre otras) solo han sido y serán emitidas en vivo o en pregrabado, a través del Facebook de la Biblioteca Piloto del Caribe y del Festival PoeMaRío.
“Aquellas que hacen parte de las alianzas pueden encontrarse por plataformas como Meet o por Zoom (...) en principio evaluamos la idea de no llevar a cabo el festival, pues no veíamos un horizonte claro, a pesar de que desde marzo hemos venido desarrollando en demasía, desde lo digital, la agenda cultural de la biblioteca de los adultos, la infantil y la del Archivo Histórico del Atlántico. Pese a todo esto pensamos en que con el festival era diferente, sin embargo llegó el momento en que decidimos asumir la organización para realizarlo”.
El cierre de este evento de ciudad, que se desarrollará el 30 de agosto, no contará con la característica de la presencialidad, pero sí promete entregar a su público una velada virtual “especial”, digna del propósito arraigado a la idea de seguir consolidando el festival como un espacio literario internacional, “que inscriba a la ciudad de Barranquilla en el circuito de los grandes eventos literarios del Gran Caribe”.
Añade que la clausura contará con cuatro importantes eventos académicos. El primero, a las 3:00 p.m., tendrá un diálogo entre tres poetas argentinos, como es el caso de Carolina Zamudio, Leopoldo Teuco y María Casiragui. Luego, a las 4:30 p.m., se llevará a cabo un recital que será presentado por Ensuncho de la Bárcena y en el que participarán los poetas Juan Carlos Guardela (departamento de Bolívar), Carlos Polo (Atlántico), Isabell Byakoo (Sucre) y Carlos Villalobos (Costa Rica). Más tarde, a partir de las 6:00 p.m., habrá otro diálogo entre los poetas María Matilde Rodríguez (San Andrés Islas), José Ernesto Delgado y Kristina Plaza (los dos de Puerto Rico). Para cerrar con broche de oro, desde las 7:00 p.m., se realizará el recital de clausura que contará con el poeta Víctor Rodríguez Núñez (Cuba), y las poetisas Sandra Lorenzano (México), Ana Luiza (Brasil) y Carolina Zamudio (Argentina).
Imagen del evento. Miguel Iriarte resalta que el concepto visual del afiche de este año, elaborado por el equipo creativo de Kimera Studios, responde al universo poético marino y nocturno del poeta homenajeado de este año: el maestro Gustavo Ibarra Merlano, ya fallecido.
“Él fue quien le enseñó a Gabriel García Márquez los clásicos españoles. Fue un poeta muy importante en la vida cultural de la Cartagena de los años 50, y de la literatura del Caribe colombiano y del país. Fue un intelectual de gran envergadura, que logró ser un gran abogado de Aduana, y quien al final de sus años decidió empezar a publicar”.
Dos invitados. La poetisa y periodista Carolina Zamudio, invitada a la clausura, define PoeMarío como uno de los festivales más entrañables en los que ha participado. Asegura que desde allí han surgido grandes amistades que apuntalan su camino en la poesía.
“Es un festival pequeño —ese es su espíritu— pero de altísimo valor estético y artístico, que enaltece la cultura Caribe. Celebro esta edición XIII de forma virtual porque, paradójicamente, la lejanía física ha permitido que surjan otras cercanías, no por eso menos significativas. Incluso, a través de la pantalla, cada uno comparte su huella personal con un estado de intimidad muy particular, además de que la audiencia de este modo es ilimitada y, por si fuera poco, democratiza la cultura (...) el domingo compartiré poemas de mi nuevo libro bilingüe ‘Vértice’, que está ahora en imprenta en Italia y se publicará con Rafaelli Editore”.
Por su parte el poeta Víctor Rodríguez, también participante de PoeMaRío, asegura que hacer parte de esta nueva edición es importante porque “se trata de un festival de poesía consolidado que pertenece al Caribe”.
Añade que este, al igual que otros, les recuerda a las personas que la poesía es un arte oral, “que le antecede a la literatura, al libro, incluso, a la palabra escrita”. Enfatiza en que recurrir en esta ocasión a la virtualidad es una idea que resulta “interesante”, y es de las “cosas buenas” que se han podido sacar de la experiencia de esta crisis mundial por el nuevo coronavirus.
“La pandemia nos ha hecho repensar el mundo de muchas maneras y creo que una de las cosas que llegó para quedarse es el hecho de hacer actividades virtuales y de comunicarnos a través del nuevo medio como son las redes sociales (...) la poesía tiene que encontrar caminos más allá de los libros”.
Un poco de historia. PoeMaRío, antes llamado Poetas del Mundo, emergió en Barranquilla desde una experiencia de 10 años consecutivos con poetas internacionales.
“Poetas del Mundo se hizo desde 1997 hasta el 2007. En el caso del PoeMaRío, este arrancó en 2008 con un conocimiento y una experiencia acumulada, así como con la aportación de la Biblioteca Piloto del Caribe (...) lo que hicimos fue empalmar todo y desde entonces no hemos dejado de realizarlo. No hacerlo este año significaba casi una claudicación”, explica Miguel Iriarte.